El exceso de calor en nuestro cuerpo genera incomodidad e incluso podemos sufrir ciertos efectos que dañarían mucho nuestro sistema, y más cuando estamos ejerciendo actividades laborales extenuantes o en áreas muy confinadas y cerradas. La ventilación natural y/o artificial es esencial para mantener una temperatura estable en cualquier habitación, todas las empresas y organizaciones deben estar plenamente conscientes de eso y trabajar para satisfacer la sensación térmica de colaboradores y las personas en general.
¿Qué es la aclimatación?
Esa es la capacidad de nuestro cuerpo para adaptarse a ambientes pesados de trabajo, sin embargo no delimitar tales condiciones mediante el uso de ventiladores o sistemas de aireación natural o artificial, puede repercutir de manera seria en nuestro cuerpo, generando efectos negativos de calor en nuestro sistema, como los que a continuación se mencionarán.
Patologías típicas en ambientes de calor y por una deficiente ventilación
Agotamiento por calor. Estar bajo esta patología (benigna), hará que nuestro cuerpo aumente un poco la temperatura, en unos 38 o 39 grados Celsius, por lo que la aparición de síntomas será inevitable, tales como: sed, debilidad para realizar ciertas actividades, dolor de cabeza, náusea e incluso nos podemos aturdir. Cabe resaltar que si al agotamiento por calor se le trata de inmediato, sus síntomas no durarán mucho e incluso no aparecerán. Además es normal que se hagan constantes evaluaciones o experimentos en esta patología, para checar la tolerancia al calor de una persona en particular.
Golpe de calor. Este es un tema ya más serio, estamos hablando que las afecciones a una persona que padezca golpe de calor precisarán de acciones emergentes, para bajarle los síntomas que son: quedar inconsciente o tener convulsiones por un daño al sistema nervioso central, falta de sudoración en el cuerpo, lo que llevaría a un incremento de calor bastante considerable, pudiendo superar los 41 °C. Una vez que la persona tenga el golpe de calor, se tendrá que realizar un procedimiento de enfriamiento, como quitarle la ropa, mojar su piel y mantener funcionando a tope cualquier dispositivo ventilador que esté a su alrededor, de esa manera aumentará el enfriamiento en la evaporación; todo esto se debe hacer hasta que sea atendido en un hospital, donde se emplean procedimientos de enfriamiento más profesionales, además de que se le dará un seguimiento.
Erupción por calor. Esta patología vendría afectando de manera importante la piel, y es que cuando nuestra dermis no está debidamente ventilada, podría aparecer una especie de pápulas rojas, que muchas veces no se llegan a notar porque tenemos la ropa puesta, sin embargo cuando empecemos a sudar más, la comezón no tardará en llegar. Este fenómeno pasa porque algunas capas de la piel absorben el agua o humedad, y se inflamarán, por lo que obstaculizarán los conductos de sudor. Es trascendental tratar esta patología, si no, es posible que se infecten otras personas.
Calambres por calor. Esto sucederá cuando perdamos mucha sal a través del sudor debido a un calor muy elevado en el trabajo o el mismo hogar, los músculos que más lo sufren son los que están en constante trabajo como las piernas. Solamente se precisará de descansar para mitigar la fatiga muscular, así como tomar el agua necesaria y balancear nuestra sal del sistema.
El uso de ventiladores o dispositivos que ayuden a mantener un lugar fresco, siempre serán de mucha importancia, y más cuando las áreas de trabajo necesitan de poseer un ambiente idóneo para la realización de labores cotidianas.