Los espacios de trabajo deben reunir ciertas características ambientales para garantizar tanto la seguridad del personal que en él labora como su confort, factor que influye en gran medida en su desempeño. Además de la temperatura, la iluminación y el nivel de humedad, la calidad del aire es de gran importancia y en esta entrada hablaremos de ventilación general para proporcionar el oxígeno suficiente en espacios cerrados y abatir la contaminación ambiental originada por la liberación de determinados compuestos en el espacio de trabajo, así como por el exceso de calor y olores corporales.
Debido a la gran cantidad de compuestos que emiten las máquinas utilizadas en los ambientes de trabajo, como impresoras, fotocopiadoras, así como los adhesivos, pinturas y sustancias limpiadoras y desinfectantes, el aire de los espacios interiores suele estar hasta diez veces más contaminado que el aire exterior. Si bien, debido a las actividades que se deben realizar en los entornos de trabajo resulta casi imposible disminuir el uso de ciertas máquinas y aparatos o dejar de utilizar sustancias químicas que emiten partículas orgánicas al ambiente y afectan la calidad del aire, se puede utilizar un ventilador u otros medios que permitan la renovación del aire para garantizar la seguridad del personal que labora en las instalaciones y evitar que se presenten problemas ocasionados por la concentración de compuestos orgánicos en el ambiente.
Lo anterior puede resultar sorprendente, tanto como lo puede ser el hecho de que las necesidades de ventilación para suministrar el oxígeno suficiente a espacios interiores sean inferiores a las que se requieren para evitar la contaminación del aire. La explicación de esto resulta bastante sencilla y basta con consultar datos sobre los requerimientos de oxígeno que necesita una persona en actividad de reposo, por ejemplo una persona que está sentada trabajando en un ordenador, y comparar esta información con la cantidad de dióxido de carbono que exhala por segundo. Mientras un individuo necesita de apenas 0.15 litros por segundo de aire fresco, para remover el dióxido de carbono, humos y olores es necesario utilizar 5 litros de aire fresco cada segundo, de ello que sea necesario que un lugar de trabajo necesite de varios medios de ventilación para reemplazar el aire, controlar su origen y disolver los contaminantes, todo esto para crear un entorno aceptable.
En la mayoría de los casos, principalmente en oficinas donde se concentra gran número de personas en un espacio reducido, para la sustitución del aire y el control de su origen se tiene que recurrir a una ventilación general que restablezca un entorno de baja toxicidad. En sí, la ventilación se emplea para ejercer control sobre el ambiente mediante el flujo de aire y consiste en renovarlo, ya sea por medios naturales o mecánicos, de manera que se reduzca la presencia de contaminantes, la emisión de malos olores y se puedan mantener las condiciones de temperatura y humedad recomendables para el confort y seguridad humanos.
La ventilación tiene en general tres aplicaciones: la prevención de incendios y explosiones, el control de contaminación del aire para establecer niveles aceptables para la salud del personal, y contribuir en el control de calor y humedad para crear condiciones de trabajo confortables para el personal, lo que influye en sus niveles de producción. En este punto cabe destacar que existen dos clases de ventilación, aunque los términos suelen utilizarse de manera indistinta. Por un lado, la ventilación general se utiliza para el suministro de volúmenes de aire y remoción de concentración bajas de contaminantes no tóxicos, mientras que la ventilación de dilución busca proporcionar comodidad y bienestar mediante el suministro de aire limpio.
Como ya mencionamos, la ventilación se puede lograr por medios naturales o mecánicos, esto puede ser mediante las puertas y ventanas, con el uso de un ventilador y extractores de aire, y muchas veces estos medios se emplean de manera simultánea en sistemas de ventilación. Las características de los sistemas de ventilación varían según el número de personas que ocupan el área; las condiciones interiores como temperatura del aire, la humedad y la temperatura radiante; las condiciones climáticas exteriores; el tipo de actividades que se realizan en las áreas a ventilar y el grado de contaminación que presentan estas áreas.
Las variaciones que estos factores pueden presentar durante un día de trabajo deben ser consideradas al momento de hacer el diseño del sistema de ventilación para garantizar que éste sea flexible y pueda adaptarse a este tipo de cambio. Además, existe otro factor que debe tomarse en consideración: la filtración, entendida como el flujo de aire que entra y sale de las instalaciones a partir de pequeñas grietas o rendijas en las estructuras. La filtración en todo caso depende de las condiciones externas como velocidad y dirección del viento, además del tipo de construcción, sus condiciones térmicas y tamaño.
Una vez determinadas las necesidades de ventilación de cada área se procede a determinar los medios más adecuados a utilizar. Para la ventilación natural se consideran las fuerzas térmicas de convección y las fuerzas resultantes de las diferencias que se presentan en la presión del viento, factores que operan simultáneamente para causar la filtración o desplazamiento del aire a través de puertas, ventanas, paredes, techos, pisos y otras aberturas, pero como ya mencionamos, todos estos dependen de las corrientes del viento y de la convección térmica. Debido a lo complicado que resulta predecir las características de estos factores, es necesario emplear ventilación mecánica, que consiste en la instalación de ventiladores, por lo regular de techo, y en el suministro de aire al interior a través de ductos.
En próximas entradas hablaremos de las características de los medios de ventilación natural y mecánica empleados en los sistemas de ventilación general y en la ventilación de dilución. Recuerda que en el catálogo de H2OTEK podrás encontrar lo que necesitas para instalar sistemas de ventilación en tu negocio, empresa, industria y en tu hogar, desde un ventilador hasta un extractor de aire de alta potencia. Para conocer a detalle las características de nuestros productos o recibir asesoría especializada en la elección del equipo que se adapte mejor a tus necesidades no dudes en contactarnos, en H2OTEK con gusto te atenderemos.