Opciones de extractores para la depuración de suciedades y partículas dañinas para el ser humano
Ya hemos descrito lo importante que es depurar los polvos dentro de un recinto industrial, y cómo los captadores de los mismos son imprescindibles, así como los extractores que empleamos para remover el aire viciado y obtener un aire puro que nos beneficie a todos. Igualmente detallamos las consideraciones para comprar tales captadores, como concentración del contaminante, eficacia requerida, propiedad de las corrientes gaseosas, propiedades del contaminante, consideración en el gasto energético, recolección del polvo, entre otros factores.
Ahora, veremos los principales tipos de extractores de polvo con sus características, como los precipitadores electrostáticos, filtros de tela, y depuradores húmedos.
Extracción con filtros de tela
Este es un método para obstruir, impactar, interceptar, y difuminar las partículas de polvo, para su posterior atracción electrostática. Para ello se emplea una tela de naturaleza orgánica o artificial. La única función de esta tela es dejar que el aire puro se ventile a través de la misma, a la vez que atrapa todo contaminante que intente traspasarla. La clave de tales tejidos es que posean el suficiente grosor, resistencia y permeabilidad para realizar su trabajo de buena forma; precisamente la permeabilidad se refiere como el volumen de aire que atraviesa el tejido de acuerdo a la unidad de tiempo con respecto a la presión medida en metros cúbicos por segundo.
Otra cuestión es ver si dicho filtro de tela es fácil de limpiar, porque no será muy eficiente si el dispositivo de filtración genera complicaciones cuando se ensucia, por más efectivo que sea en su detención de los contaminantes; tiene que haber permeabilidad, para que haya una verdadera eficiencia en el extractor del polvo. A final de cuentas, es usar a las mismas partículas contaminantes para que hagan el trabajo de filtración.
Depuradores húmedos
Estos sistemas tienen el objetivo de tratar los gases o vapores que poseen mucha humedad en su
composición, asimismo, tratan aquellas partículas polvorientas que podrían representar un peligro de incendio o explosión dentro de un entorno industrial, mediante la humidificación de tales partículas. Tal vez un inconveniente a lo que se enfrentan los que adquieren estos dispositivos, es al hecho de una alta posibilidad de corrosión del material interno de los mismos, y más si se colocan en exteriores de un edificio, en ese caso, es preponderante proteger esos sistemas del clima frío y húmedo.
Así es, se podría decir que los depuradores son como una clase de humidificadores. La cuestión aquí es buscar una eficiencia en el uso de los depuradores húmedos, para que no exista un exceso de carga cuando interactúan tales dispositivos con los ventiladores del lugar. Debe ocurrir una sinergia para humidificación del aire con el objetivo de bajar las temperaturas, a la vez que se depura el aire.
Precipitadores electrostáticos
Estos sistemas trabajan a través de dos electrodos, de colector y de descarga. Esto sirve para la depuración o extracción de gases. El objetivo es que las partículas contaminantes cargadas con energía interactúen al tocar el electrodo, y cuando lo hacen, el polvo inmediatamente perderá su fuerza de atracción, haciendo más fácil su remoción del interior, ya sea por caída libre, vibración, o lavado.
¿Cuál es el proceso que hace el precipitador electrostático como extractor de partículas?
1.- Primero ioniza el gas.
2.- Posteriormente se cargan las partículas contaminantes de polvo.
3.- Después se transportará el contaminante hacia una superficie captadora de partículas.
4.- Luego, las partículas de polvo que generan la polución se neutralizarán por acción de los electrodos; al perder su carga electrostática, tales partículas quedarán completamente inutilizadas.
5.- En esta última etapa, la superficie captadora eliminará por completo al polvo contaminante.