Conocer las propiedades de los contaminantes para un mejor uso de dispositivos de extracción y un ahorro energético.
En la primera parte de este artículo mencionamos las principales diferencias entre los filtros de aire y los captadores de polvo, y de la utilidad que pueden tener estos dos elementos en los sistemas de extracción industrial. Asimismo empezamos a detallar los factores que debemos tener en cuenta para la adquisición de un sistema como tal, como la concentración de contaminante, eficacia requerida, entre otros. Ahora reanudamos describiendo más consideraciones.
Eficacia requerida (continuación). Es importante decir que la eficacia depurativa para la obtención de un aire más limpio, dependerá del tipo de contaminante que genera una empresa industrial como tal, así como la calidad de los depuradores en su desempeño. Una empresa que esté en una zona industrial relativamente alejada de la zona urbana puede caer en el error de que no precisará de un equipo de extractores o depuradores industriales de alta calidad y robustez, porque piensan que están alejados de la población y sus contaminantes no harían daño alguno. Sin embargo eso es un error, ya que la contaminación atmosférica que se vaya acumulando en dicha zona, podría dificultar la posibilidad de poblar los alrededores del área industrial en cuestión, por lo que las autoridades llamarían la atención de manera importante a la empresa que realiza sus actividades, obligándola a tener que modificar su estructura para emplazar nuevas instalaciones de ventilación, como ventiladores, extractores o captadores de polvo mucho más robustos; esto generaría un costo muy elevado. Lo mejor sería desde un inicio planificar un sistema de depuración eficiente, para no tener estos problemas futuros. Prácticamente las obligaciones de no contaminar y mejorar la calidad del aire de una planta ubicada en las afueras, serían las mismas de una que se sitúa en el área urbana, al menos así se reglamentaría.
Eficacia requerida (continuación). Es importante decir que la eficacia depurativa para la obtención de un aire más limpio, dependerá del tipo de contaminante que genera una empresa industrial como tal, así como la calidad de los depuradores en su desempeño. Una empresa que esté en una zona industrial relativamente alejada de la zona urbana puede caer en el error de que no precisará de un equipo de 
Un factor que puede incidir en la compra de un sistema robusto o uno sencillo es el caudal másico que emita la planta en cuestión, es decir, cuanto mayor es este caudal, se requerirá de un mejor sistema. Una empresa pequeña solo necesitará de un extractor simple, mientras que una planta grande precisará de sistemas de filtración de gran eficacia o en su defecto, precipitadores electrostáticos.
La prevención de riesgos a la salud y los daños a terceros es un tema muy importante para cualquier planta industrial. Se deben cumplir cabalmente los objetivos de no contaminar la atmósfera y ambiente interno de la planta, cuidando de apreciar factores que determinan la erradicación de los contaminantes expresados en los efluentes gaseosos, tamaño de partículas, eliminación del polvo, entre otros.
- Propiedades de las corrientes de gas. Es trascendental tomar en cuenta las características de los gases generados por la contaminación de la planta, ya que su tipo y frecuencia determinan el equipo o sistema que se debe utilizar para la depuración o extracción, por ejemplo: ¿qué tipo de filtros resisten los gases?, ¿qué tipo de separadores pueden resistir obstrucciones por la condensación de vapor?, ¿habrá peligro de corrosión si exponemos nuestros ventiladores o depuradores a ciertos gases o partículas contaminantes?
- Propiedades del contaminante. La abrasión proveniente de concentraciones elevadas de contaminación puede mermar con facilidad nuestro sistema de extracción. Esto es un ejemplo de las características que puede poseer un contaminante. También hay que analizar si ciertas actividades industriales como el pulido de metal, el uso de ciertos materiales fibrosos o incluso la utilización de productos químicos inciden de manera directa en los filtros, depuradores o captadores de contaminantes, de ser así, los elementos de extracción antes mencionados podrían resultar afectados en sus componentes y materiales, haciéndolos inútiles para su propósito principal: la eliminación de contaminantes.
- Considerar el gasto de energía. Esto sin duda es muy importante para elegir los mejores sistemas de extracción, ya que implica un ahorro de coste energético para la compañía. Por ejemplo, un precipitador electrostático a pesar de ser costoso, eventualmente generaría un ahorro de energía eléctrica. Asimismo es necesario analizar y planificar qué nos conviene más, si instalar todo un sistema robusto para un área específica, o sería mejor hacer una instalación de varios dispositivos extractores en serie. Las posibilidades son muchas.
- Recolección de polvo. Es esencial conocer la cantidad de polvo a remover, así como discernir el material que se estaría extrayendo y de qué procesos se originan dichas suciedades. Solo así sabremos si emplear un captador normal, uno con válvulas especiales e incluso depuradores húmedos. A final de cuentas, lo importante es que no vaya a posibilitarse una acumulación de polvo en las bóvedas o alcantarillas, que posteriormente formen espumas o incrustaciones en los mismos depuradores.
