Uso de purificadores de aire, ventilación, deshumidificación y climatización sana en tiempos de pandemias como coronavirus COVID-19
El aire puro es fundamental en todo momento y en todos lugares, siendo los geriátricos y asilos, así como clínicas y hospitales, un tópico obligado. En tiempos de pandemias y contingencias, es cuando parece que estamos más conscientes de ello; lamentablemente es en esos penosos momentos, cuando
nos damos cuenta acerca de su importancia.
Existen normativas para centros geriátricos, asilos de ancianos e instituciones similares, que plantean los parámetros que se deben seguir para tener una ventilación óptima dentro de tales edificios. Todo esto engloban aspectos de construcción, diseño arquitectónico, la inclusión de climatización sana, que a su vez abarca todo lo referente a aire acondicionado, Mini Split Inverter, calefacción, refrigeración, extracción, e incluso humidificación y deshumidificación, donde todo esto tiene que llegar a un concepto simple pero de mucha importancia: aire puro.
La calidad del aire debe ser preponderante en asilos de ancianos y edificios en general, que traten temas de salud y sanidad para las personas que residan en ellas. No solo a través de purificadores de aire, sino convergiendo en todos los temas que acabamos de mencionar; desde luego, esto incluye al agua caliente sanitaria.
La calidad de aire óptima o máxima, aplica para hospitales, laboratorios, guarderías y clínicas en general. Mientras que una buena calidad de aire, va para centros geriátricos, hoteles, oficinas, museos,
escuelas, universidades, áreas de albercas, entre otros.
Aquí estamos viendo las condiciones esenciales que se deben combinar para un ambiente sano en estos lugares. La climatización sana es un rubro que todos los profesionales en estas áreas tienen que atender, y más en lugares susceptibles a contraer brotes pandémicos peligrosos, como el COVID-19. La ventilación natural o artificial deberá tener una adaptación especial, de acuerdo a cada edificio y dependiendo de lo que antepongan los expertos. Asimismo, la colocación de purificadores de aire, humidificadores, deshumidificadores, mini splits, y demás cuestiones, tendrán que contar con una planificación seria, no solo poner los aparatos en áreas de un modo al azar, o porque nos parece bien que en ese lugar estará correcto. Hay que analizar factores de clima de la región, sensación térmica, composición de materiales de edificación e incluso hasta presión atmosférica.
Uno de los aspectos fundamentales dentro de algunos códigos técnicos de edificación, las directrices que
anteponen son claras, respecto que los sistemas de climatización sana para un aire puro, como: aire acondicionado, ventilación, calefacción y demás, deberán contar con suficientes medidas de seguridad, para una manipulación confiable de los aparatos, así como un funcionamiento de acuerdo a las demandas requeridas de temperatura ambiente. Hay que recordar que la sensación térmica es importante, y cada persona de la tercera edad lo puede percibir de forma diferente, es aquí cuando entra la sensibilidad del personal para dar lectura a esas percepciones de cada residente, y con base en eso, proporcionar la mejor temperatura y saturación atmosférica, claro, sin afectar la calidad del aire, que siempre debe permear en tales residencias de ancianos. En ese sentido, tal vez se tenga la necesidad de recurrir a la zonificación, para proporcionar un confort individualizado.
En cuanto a la calefacción, la seguridad es aún más esencial, sabiendo que muchos de estos dispositivos suelen estar al descubierto en los mismos interiores de los centros geriátricos. Estos elementos tendrán que contar con protección básica y si se puede, adicional, para que los abuelitos no tengan riesgo de quemarse al entrar en contacto con tales mecanismos.
Una vez que se salga de las crisis sanitarias en las que estamos inmersos, se espera que siempre tengamos en cuenta lo importante que es estar preparados, y no esperar a otra pandemia, porque si somos responsables con el tema de sanidad, ambientes saludables y la percepción de un aire puro, entonces podremos creer que estamos listos para afrontar las próximas crisis por venir, para la humanidad.