El tema de la ventilación es muy interesante ya que implica el conocimiento de caudales y diseños de extractores u otros dispositivos de aireación. En anteriores artículos hemos mencionado la importancia de conocer las funciones más específicas de tales sistemas, ya que los factores externos e internos que existen en un entorno industrial nos obligan de cierta manera a conocer más a fondo el funcionamiento específico de sistemas de ventilación.
Tipo de ventiladores para material con partículas
Los sistemas de ventilación axiales, al igual que los centrífugos con las palas hacia atrás son la mejor opción para contrarrestar los humos o polvos en cantidades menores. En cambio, cuando existen cantidades más prominentes de tales elementos, lo mejor será emplear centrífugos de palas rectas; esta clase de dispositivos también sirven para disipar cualquier aparición de humedad. Si las partículas materiales están muy cargadas o se precisará de transportación de material, entonces lo mejor será adquirir un aparato de ventilación tipo centrífugo con palas rectas.
Cuando se trate de controlar material peligroso, como partículas explosivas e inflamables, se deberá recurrir a un sistema especial y hecho a la medida de los requerimientos del emplazamiento industrial o comercial. Para ello hay que checar las normas específicas de la localidad en cuanto a seguridad industrial.
En caso de presencia corrosiva generada de algunos materiales, se recomienda utilizar recubrimientos hechos a base de fibra de vidrio o acero inoxidable, así obtendremos una seguridad contra efectos corrosivos.
Para la instalación de dispositivos o más aún, para la construcción especial de un medio de aireación, será preponderante tomar en cuenta la temperatura máxima de operación que puede soportar la estructura, es decir, calcular la resistencia de los materiales.
Consideraciones de espacio, accesibilidad y de transmisión para la instalación de ventiladores
Generalmente, el rendimiento de los aparatos de ventilación viene en conjunto con el tamaño de los mismos. Antes de comprar el de mejor rendimiento, es necesario asegurarnos de las necesidades espaciales de nuestra área a ventilar. Asimismo se aconseja pensar profundamente en la ubicación donde se emplazará el sistema, así como el peso del artefacto de aireación.
Las fuentes de energía como los motores, vienen ya ensamblados con los dispositivos para ventilar, aunque estos serán de un tamaño menor. En cambio, al hablar de unidades más robustas, será obligatorio el uso de acoplamientos para poder ensamblar el motor eléctrico con la unidad de ventilación.
Cómo es el acoplamiento directo y la transmisión por correas para ventiladores
La ventaja de acoplar directamente el aparato para ventilar, es que el sistema será más compactado y con una funcionalidad del dispositivo constante. Para el manejo o control de las velocidades, se tendrá que recurrir al motor de velocidades o a los mismos reguladores. La capacidad de flujo de aire queda atada a los parámetros de medidas de las palas y a la potencia del motor.
La transmisión por correas permite una flexibilidad en la función del sistema de aireación, a tal grado que podemos manipular los caudales o presiones, dependiendo de las necesidades de procesos que se vayan generando en el espacio cerrado, como alteraciones en unidades de depuración u otros elementos de extracción. Si bien son prácticos en su manejo, la transmisión por correas necesitará de un mantenimiento especializado.
Por qué se genera ruido en los ventiladores
Esto es interesante y algo complejo, porque esta clase de sistemas generan un sonido donde se combinan todas las frecuencias. En cuanto a la magnitud o nivel de ruido, se debe más que nada al tipo de dispositivo y su carcasa, sin embargo nada es igual, así que si se necesita adquirir el producto como tal, entonces hay que pedir información al vendedor o fabricante, para tener una mejor idea de las emisiones vibratorias o de sonido.
